El Salón de actos de la Biblioteca Central de Santander se llenó ayer para rendir homenaje a un gran luchador, Jesús de Cos, que dedicó toda su vida al combate por la Libertad y por la República y más tarde al combate por la Memoria de sus compañeros de guerrilla, por los deportados a campos de concentración nazis y por las mujeres fusiladas y represaliadas a quienes dedicó diversos monumentos por toda la geografía de Cantabria.
Hoy se cumplen 10 años de su fallecimiento y aún se sigue sintiendo su ausencia, seguimos echando en falta su vitalidad y su energía, siempre emprendiendo nuevos proyectos. Un luchador incansable que nunca se dio por vencido. “Los únicos vencidos son los que no luchan” decía Rafael Amor en una canción y eso inspiró el título del libro de Jesús de Cos: “Ni bandidos, ni vencidos”.
Ayer se dieron cita en la Biblioteca Central diversos colectivos y partidos, IU, CNT-AIT, cantabristas. También acudió la Directora General de Patrimonio Cultural y Memoria Histórica, Zoraida Hijosa.
Abrió el acto María Toca que repasó no solo la vida de Jesús de Cos sino también de su padre, Donato de Cos, muerto en Gusen y eje principal de la familia, que dio lugar a una estirpe de luchadores.
Intervino después el periodista y escritor Isidro Cicero que conoció a Jesús y nos habló de cómo se heredan los traumas en las familias que han sufrido la represión, como fue el caso de la familia de Cos, cuyo padre murió asesinado por los nazis, su hijo Manolo de Cos fue condenado a muerte pasando muchos años en la cárcel y en campos de trabajos forzados, su otro hijo, Jesús, se tuvo que echar al monte. Un hermano de Donato fue ejecutado a garrote vil en Santander. Les desposeyeron de todos sus bienes, en fin, una familia destrozada por la barbarie fascista, como muchas otras en este país nuestro.
Después tomó la palabra el historiador Fernando Obregón que desarrolló su visión de cómo era Jesús, en torno a cuatro palabras: energía, compromiso, antifascismo y memoria.
A continuación, Mari Sol Gonzalez, viuda de Jesús de Cos y delegada de AGE en Cantabria, leyó un escrito enviado por el hermano de Jesús, Maximino de Cos, que, a punto de cumplir 101 años, no pudo asistir al acto de homenaje, pero envió un resumen en pocas palabras de la trayectoria de la familia de Cos.
Y cerró el acto Mari Sol con un poema que Antonio Casares dedicó a Jesús de Cos titulado "Palabras para un nuevo Quijote" que emocionó a toda la sala y muy especialmente a Mari Sol que apenas pudo terminar el poema.
Coloquio final:
Siempre en nuestros corazones, compañero, ejemplo de vida y de lucha.
PALABRAS PARA UN NUEVO QUIJOTE
(dedicado a Jesús de
Cos por Antonio Casares, 10 de mayo de 2008)
Te llamas Jesús, como
Jesucristo,
eres un Quijote, como
el de La Mancha,
luchas por las cosas
que te pertenecen,
aunque te las nieguen
aquellos que mandan.
Sigues siendo el mismo
que fuiste y serás,
eres transparente como
el agua clara
de los manantiales de
la libertad:
el sueño que siempre
tuviste en tu alma.
Todos tus afanes son
republicanos.
Todas tus ideas son
republicanas.
Por eso yo quiero
escribirte un poema
para que lo canten los
que nunca cantan,
para que lo lean los
que nunca leen,
para los que olvidan,
para los que callan.
Tú eres el espejo para
que se mire
el Adán futuro, la Eva
de mañana,
la luz que nos guía en
la hora presente,
cuando algunos niegan
la evidencia, o hablan
para sembrar odio donde
tú sembraste
la semilla eterna de
una nueva patria,
donde quepan todos,
donde nadie vuelva
a forjar cadenas, a
templar espadas,
a poner sus sucias
manos sobre el pueblo,
a inventar la historia
o a tergiversarla.
Sigue hacia adelante,
Caballero Andante,
persiguiendo sueños,
partiéndote el alma
por los ideales que
siempre tuviste,
siendo como un Cristo
de perdidas causas.
Tú eres para mí un
nuevo Quijote.
¿Me dejas Jesús, ser
tu Sancho Panza?
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Mensaje de Dolores Cabra, Secretaria General de AGE, que no pudo asistir al homenaje en Santander:
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