Josefina Lavín con Jesús de Cos ante el monumento a las mujeres represaliadas por el franquismo (Camargo) |
En Cantabria todo el mundo sabía que el mítico guerrillero José Lavín Cobo "El Cariñoso" tenía una hija llamada Josefina, fruto de su amor por María Solano, con la que planeaba huir a Francia en 1941 estando ella embarazada, pero sus planes no llegaron a realizarse porque él fue muerto a tiros en Santander cuando ya estaban listos para partir.
Entonces empezó el calvario de María Solano que fue detenida y condenada a muerte, pena que no llegó a ejecutarse por estar embarazada, pero pasó 12 años en la cárcel, donde nació su hija Josefina, que cuando tenía un año fue recogida por la abuela paterna, la madre del Cariñoso, y criada hasta los 12 años, en que el azar quiso que una periodista norteamericana estuviese haciendo un reportaje en la cárcel entrevistando a algunas presas, por lo que se enteró que María Solano era ciudadana estadounidense, ya que había nacido en USA, donde sus padres habían estado trabajando y viviendo. Lo puso en conocimiento de la Embajada de Estados Unidos y al poco tiempo fue liberada, entonces pudo viajar a su país de nacimiento junto con su hija Josefina que siempre ha llevado los apellidos de su madre, Solano Otí, ya que no le permitieron registrarla con el apellido paterno.
Ahora, 71 años más tarde se ha hecho justicia y un juez ha reconocido a Josefina el derecho a llevar el apellido de su padre: Lavín. Ahora ya es Josefina Lavín Solano y está feliz y muy orgullosa.
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