El día 6 de agosto de
2016, cuando cumplía 94 años, falleció Isabel Torres Hervás, hermana del guerrillero
antifranquista de la AGLA Manuel Torres Hervás, y madre de nuestra
compañera y miembro de la Junta Directiva de AGE, Seba Ortega
Torres.
Isabel Torres Hervás murió de edad, pero sobre todo murió de pena, de tristeza, de sufrimiento por la eterna espera de su hermano el guerrillero Manuel, hermano que nunca llegó porque fue asesinado por la guardia civil en las cercanías del pantano de Benagéber en 1947.
Isabel Torres Hervás murió de edad, pero sobre todo murió de pena, de tristeza, de sufrimiento por la eterna espera de su hermano el guerrillero Manuel, hermano que nunca llegó porque fue asesinado por la guardia civil en las cercanías del pantano de Benagéber en 1947.
Isabel y Seba, madre e
hija, no se rindieron nunca en su enorme batalla por la justicia.
Buscaron al hermano y tío siempre, sin éxito alguno, hasta que el
programa de Lobatón "Quién sabe dónde" inició la pista que
las llevó al fatídico descubrimiento. Manuel no podía regresar
porque estaba muerto y enterrado en una fosa común.
Amparadas por el
asesoramiento jurídico del Equipo Nizkor y de su Asociación AGE,
llevaron ante los tribunales la denuncia por la apertura ilegal de la fosa común en
la que se encontraban los restos de Manuel, asesinado a manos de la
Guardia Civil en Benagéber, en 1947. Esa larga lucha titánica en la
que mantuvimos prácticamente en solitario la demanda de justicia
ante los tribunales, aunque no tuvo resultado positivo en nuestro país (a causa del
amparo de la aberrante Ley de Memoria Histórica, ley de punto final) sembró un precedente de combate civil.
Es evidente que el
Gobierno español, a través de la Ley de la Memoria Histórica,
tiene la intención, no sólo de consolidar lo que denominamos "el
modelo de impunidad español", sino que además y mediante una
forma perversa de utilización del poder, tiene la pretensión de
enfrentar memoria a justicia como forma de obviar la
aplicación del derecho penal internacional y del derecho europeo,
así como de la práctica seguida en toda Europa con las víctimas
del franquismo, convirtiendo los desenterramientos bajo esta ley en
una forma legal de destrucción de pruebas penales y de
fortalecimiento del negacionismo histórico.
Isabel, tu lucha no fue
en vano, hemos heredado tu fortaleza y somos herederos de la memoria.
Continuaremos tu combate junto a tu hija Seba. La demanda de justicia
por Manuel, por los Manuel del mundo, sigue activa entre nosotros. La caja de música
estará siempre en tus risueños ojos y en los últimos abrazos,
amiga querida.
Dolores Cabra
Secretaria General de
AGE
Este
impresionante caso se puede seguir en:
Entradas
Freedom to Catalonia!
ResponderEliminar