Leyendo este artículo de nuestro socio y colaborador, Raimundo Castro, cabe preguntarse cómo es posible que aún sigan siendo legales los juicios del franquismo, aquellas farsas de juicio en que se condenaba por auxilio a la rebelión a los que habían defendido la legalidad democrática de la República y eran precisamente los rebeldes quienes los condenaban. Es hora ya de declarar la nulidad de los juicios de la represión franquista.
Esta democracia tiene tareas pendientes ineludibles que no se pueden soslayar por más tiempo.
Es
impresionante la historia que nos cuenta de Francisco Vera Manzano, el
último preso del Valle de los Caídos, una historia que Raimundo conoció
gracias a nuestro socio Angel Prieto, extremeño también.
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